Esta es la historia de la primera y última vez que me enamoré. A veces pienso que todo lo que te quise de algo habrá valido. Y no me jode por los sueños, me jode por los inviernos que parecían primaveras. Ningún amor de verano podrá darte el calor que yo te daba en invierno. Y aunque te eche de menos a morir, hay amores eternos que duran lo que dura un invierno. Sigo hablando de sus ojos cuando me preguntan por mi color favorito. Desde el día que se fue la vida sigue como las cosas que no tienen mucho sentido.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Ya no hay nada.

Lo que es es y lo que no es no puede ser, por tanto es imposible. Y por eso nosotros.
Ya no ha quedado ni la mínima huella de aquel tsunami que arrasó mi vida. Cuando besas, nadie se gira para ver mi reacción o simplemente consolarme con un "besa por besar". En eso debe consistir el olvido (no he tenido placer de conocerlo aún).

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