Esta es la historia de la primera y última vez que me enamoré. A veces pienso que todo lo que te quise de algo habrá valido. Y no me jode por los sueños, me jode por los inviernos que parecían primaveras. Ningún amor de verano podrá darte el calor que yo te daba en invierno. Y aunque te eche de menos a morir, hay amores eternos que duran lo que dura un invierno. Sigo hablando de sus ojos cuando me preguntan por mi color favorito. Desde el día que se fue la vida sigue como las cosas que no tienen mucho sentido.

martes, 31 de enero de 2012

No lo voy a negar.

Esto tiene los días contados, se consume como una vela en una noche sin electricidad. ¿Electricidad la que salta cada vez que me tocas, recuerdas? No lo digo por decir, te quiero, es más, te amo. Duele el amor, duele aún teniéndote. Lo mejor que me ha podido pasar es él, no me quejo. Es mi mayor vicio y necesito dejar de depender de él.  No quiero que me de un beso porque necesitaré dos, luego tres y no podría dejarlo ir. Me gusta cuando me mira y tiemblo. Me gusta cuando sonríe y sonrío. Me gusta él, me encanta.

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