Esta es la historia de la primera y última vez que me enamoré. A veces pienso que todo lo que te quise de algo habrá valido. Y no me jode por los sueños, me jode por los inviernos que parecían primaveras. Ningún amor de verano podrá darte el calor que yo te daba en invierno. Y aunque te eche de menos a morir, hay amores eternos que duran lo que dura un invierno. Sigo hablando de sus ojos cuando me preguntan por mi color favorito. Desde el día que se fue la vida sigue como las cosas que no tienen mucho sentido.

lunes, 23 de abril de 2012

El paso del tiempo no es sinónimo de olvido.

Siento de esas tristezas que hasta te quitan las ganas de escribir. Una de esas que se aferra en tu alma, la que te quita la ilusión por seguir con vida. Y ya van 7 días. Tal vez no fui suficiente para él. Puso en una balanza su amor por mi y su amor por todas. Ellas ganaron. Nunca me quiso, y si lo hizo no fue suficiente. No vale la excusa de los 16 años, yo los tengo y sé bien lo que quiero, le quiero. No, no me vale alguien que lleve su nombre, tenga el color de los ojos más claro y sea más alto. Un clavo saca otro clavo, mentira. No me conviene pero juro que le quiero en mi vida. Puedo llamarlo error, pero erraría mil veces. Volvería a romper mil zapatos de tacón por escaparme con él, volvería a tirarme en el suelo a su lado, volvería a besarle.

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