Esta es la historia de la primera y última vez que me enamoré. A veces pienso que todo lo que te quise de algo habrá valido. Y no me jode por los sueños, me jode por los inviernos que parecían primaveras. Ningún amor de verano podrá darte el calor que yo te daba en invierno. Y aunque te eche de menos a morir, hay amores eternos que duran lo que dura un invierno. Sigo hablando de sus ojos cuando me preguntan por mi color favorito. Desde el día que se fue la vida sigue como las cosas que no tienen mucho sentido.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Y tienes corazón de hierro.

No te da ni un poco de pena? No me echas ni siquiera un poco de menos? Las tardes de domingo no son más frías? No me recuerdas cada vez que vas al instituto? No quisieras que volvieran aquellos mensajes que tanto te gustaban? Parece que no echas de menos nada. Como te llamaba tonto, te decía: me encantas idiota(: sin saber que la única idiota era yo. No te gustaba que te dijera siempre yo te quiero más? Nunca pensaste en la forma en la que nos mirábamos a los ojos... parece que ni sientes ni padeces. Volvería a empezar de cero, solo por repetir un momento junto a ti.

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